¿Qué alimentos consume a diario? ¿Puede decir con seguridad que se alimenta de manera correcta? En esta nota le mostraremos qué debe tomar en cuenta en su dieta diaria para tener una vida saludable a largo plazo.
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¿Por qué es importante tener una buena alimentación?
Diversos investigadores alrededor del mundo han demostrado que seguir una dieta saludable reduce el riesgo a padecer distintos tipos de cáncer, diabetes, obesidad, osteoporosis y cardiopatías. Por ello, es importante encontrar una dieta acorde a cada persona que nos ayude a mantener una alimentación balanceada.
¿Qué es la alimentación preventiva?
Es un concepto que busca concientizar a las personas para que tengan una buena alimentación, que contribuya al crecimiento correcto de nuestro cuerpo e influya en el rendimiento físico y mental en nosotros. Es decir, que busca crear una cultura de prevención a favor de la salud, de manera que podamos vivir saludablemente a largo plazo libres de cáncer y enfermedades crónicas.
¿Qué alimentos debemos evitar?
Evite el consumo de alcohol
Diferentes estudios han mostrado que el consumo de alcohol aumenta el riesgo a sufrir cáncer de cavidad oral, faringe, laringe, esófago e hígado. Por otro lado, debemos tener en cuenta que es posible que la persona que bebe también fume, lo cual multiplica el riesgo de sufrir los cánceres mencionados. Otros cánceres que también están relacionados con el consumo de alcohol son el cáncer de mama y colo-rectal. Los beneficios de consumir pequeñas cantidades de bebidas con alcohol, como el vino, para prevenir algunas enfermedades cardiovasculares, hacen que el consumo recomendado se limite a una o dos copas al día de bebidas con contenido alcohólico. En el caso de que se consuma, se tiene que limitar a dos copas o menos por día en los hombres, y a una copa o menos por día en las mujeres.
Limite el consumo de grasa de origen animal y de los alimentos grasientos en general
Las dietas ricas en grasa de origen animal incrementan el riesgo de sufrir cáncer de pulmón, de mama, colo-rectal, de endometrio o de próstata. Por otro lado, debemos tener en cuenta que este tipo de alimentos incrementan notablemente el riesgo a tener obesidad.
Limite el consumo de alimentos conservados en sal
Es bueno disminuir considerablemente el uso de sal y de conservantes, evitando consumir alimentos que los contengan ya que estos alimentos incrementan el riesgo a desarrollar cáncer de estómago. Sin embargo, no suponen ningún riesgo si son consumidos de forma ocasional. Por otro lado, es importante que evite comidas que se hayan podido estropear por estar mal conservadas.
Evite los alimentos chamuscados
Este tipo de cocción produce aminas aromáticas que pueden ser carcinogénicas. Los alimentos ahumados pueden contener hidrocarburos policíclicos aromáticos que pueden ser carcinogénicos. Coma carne hecha a la barbacoa sólo ocasionalmente, así como alimentos curados o ahumados. Las dietas compuestas por alimentos que en su cocción se chamuscan (barbacoas o alimentos muy fritos), aumentan el riesgo a contraer cáncer de estómago y cáncer colo-rectal.
Recuerde: El tabaco no le aporta ningún beneficio a su salud, solo deteriora el buen funcionamiento de sus pulmones y de su sistema respiratorio en general. Dígale no al tabaco.
¿Qué podemos hacer para mejorar nuestra dieta?
Una dieta equilibrada con consumo abundante de frutas y verduras, reduciendo la carne roja, las grasas de origen animal, la sal, los alimentos curados o ahumados y bebiendo poco o nada de alcohol, ayuda a prevenir todos los tipos de cáncer en más del 30%. Para reducir el riesgo de problemas de salud en su vida, le recomendamos incluir en su alimentación diaria los siguientes alimentos:
Frutas y verduras
Incluya en su dieta diaria entre 400 a 800 gramos de frutas y verduras frescas. Estos componentes en su dieta aportarán fibra, minerales, muchas vitaminas y otras sustancias bioactivas que serán la clave para prevenir diferentes tipos de cáncer.
Granos integrales, legumbres, frutos secos y semillas
Coma entre 600 y 800 gramos diariamente de legumbres, cereales (granos), tubérculos y otros alimentos de origen vegetal. Incluir este tipo de alimentos en su dieta aportará carotenoides y vitaminas C y E que le ayudarán a reducir el riesgo de contraer cáncer de colón.
Cantidades moderadas de pescado, aves de corral y carnes magras
Se recomienda comer carnes de 1 a 2 veces por semana debido a que las legumbres nos otorgan las proteínas que necesitamos. Sin embargo, es importante limitar comer carnes rojas o magras (ternera, cordero, cerdo) a menos de 80 gramos por día, es preferible comer pescado, pollo u otros tipos de carnes. Las dietas que contienen cantidades elevadas de carnes rojas o basadas en productos elaborados a partir de estas carnes incrementan el riesgo de sufrir cáncer colo-rectal, de páncreas, próstata, mama y riñón. Es recomendable que las calorías aportadas por este tipo de comidas no superen el 10% del total.
Productos lácteos descremados y sin grasa
Los productos lácteos no son prioridad en nuestra dieta, sin embargo, son fuente de calcio, proteínas y vitamina A, que ayudan a fortalecer los huesos y a desarrollar el sistema nervioso, por lo cual se recomienda consumir cantidades moderadas en balance con el resto de los alimentos mencionados anteriormente.
Una buena alimentación permitirá que goce de una larga vida libre de complicaciones de salud y si desea mejorar el rendimiento de nuestro cuerpo junto a esta dieta, le recomendamos acompañarla con 30 minutos (mínimo) de ejercicios físicos diarios.
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