15 de Octubre «Día Mundial del Lavado de Manos».
El éxito de esta iniciativa depende de todos, contamos con tus manos para hacer nuestra salud más segura.
DIA MUNDIAL DEL LAVADO DE MANOS – 15 DE OCTUBRE
«Día Mundial del Lavado de Manos».
El éxito de esta iniciativa depende de todos, contamos con tus manos para hacer nuestra salud más segura.
“Por qué lavarnos las manos”
El lavado de manos previene infecciones respiratorias, como la gripe común o gripe A, neumonía, tosferina y bronquiolitis.
Previene de patologías de transmisión feco-oral como cólera, diarrea y hepatitis A y E, así como la gastroenteritis, gastritis o neumococo, enfermedad mano-pie-boca o lombrices intestinales.
La OMS asegura que un lavado frecuente implica menos enfermedades que requieran antibióticos y por ende, ayuda a disminuir su creciente resistencia.
“Hablemos de estadísticas”
El hábito frecuente de lavarse las manos ayuda a protegerse de la aparición de hasta 200 enfermedades.
De hecho, según datos de Unicef, más de 300.000 niños menores de cinco años murieron en todo el mundo por enfermedades diarreicas ligadas a la falta de agua potable y saneamiento.
Además que diversos estudios han mostrado que el lavado de manos con jabón después de ir al baño y antes de comer puede reducir la incidencia de enfermedades diarreicas en un 40% o en un 25% la tasa de contagio de neumonía entre los menores.
Cada año, 1,4 millones de niños mueren por enfermedades prevenibles como la neumonía y la diarrea.
“Haz del lavado de manos un hábito”
La OMS recomienda lavarse las manos al llegar a casa, tras viajar en transporte público o después de estar en espacios cerrados y con mucha gente.
Es importante lavarse las manos con agua y jabón al preparar los alimentos o manipularlos, después de tocar tierra o alimentos.
Es necesario lavarse las manos tras usar el inodoro o cambiar pañales, antes de tocar a un bebé o si se está en contacto con ancianos o enfermos, así como después de estornudar o toser.
“Como lavarnos adecuadamente las manos”
Para que el lavado de manos sea eficaz hay que tomarse el tiempo adecuado, unos 40 o 60 segundos en total.
No olvidar ninguna de las cinco fases: mojado de manos, enjabonado, frotado, aclarado y secado.
Así, un correcto lavado de manos implica siempre la utilización de agua a cualquier temperatura y de jabón o gel, así como el frotado «a conciencia» de ambos lados de las manos, dedos, espacio entre los dedos y debajo de las uñas durante al menos 20 segundos, procediendo posteriormente al aclarado completo que arrastre toda la suciedad.
En cuanto al secado, en el ámbito doméstico puede realizarse con una toalla de tela, la cual se debe cambiar con frecuencia en función del uso y de las personas que la utilicen.
Cuando hay enfermos, las toallas deberán ser individuales, así como en el caso de los niños pequeños o ancianos. Finalmente, en el ámbito público, el secado de manos debe hacerse por ventilación o toalla de papel. «El gel hidroalcóholico u otros sistemas, como las toallitas con solución jabonosa, son una alternativa cuando no hay acceso a jabón, agua o lavabos», han zanjado los expertos.
Así que no olvidemos “Lavarnos las manos”
